¿Qué c… es procrastinar? Pues muy sencillo. Consiste en aplazar las cosas importantes que tenemos que hacer. Y en lugar de acabar nuestro trabajo nos dedicamos a ver memes de gatos en Facebook. Porque está claro que ver memes de gatos en internet es más importante que entregar el informe anual de la empresa. Buenooo, bromas aparte, en este episodio vamos a ver justamente eso 😀 Podéis dejarnos un comentario con las dudas o con cualquier cosa que queráis decir.
Transcripción
Hoy Hablamos, episodio 212. La procrastinación.
[Música introducción]
Bienvenidos a Hoy Hablamos, el podcast para aprender español cada día. Ya lo sabéis, publicamos nuestro podcast de lunes a viernes. Podéis escucharlo en iTunes, en Android o en nuestra página web hoyhablamos.com.
Recordad que en nuestra web tenéis disponible la transcripción completa del audio que estáis escuchando.
Hola a todos. ¿Qué tal va todo? Ya vemos el fin de semana cerca, eh. Bueno, gracias por escuchar este episodio, seguro que no os arrepentís puesto que hoy os traemos uno de esos temas distendidos que tanto os gusta.
Hoy vamos a hablar de un tema muy presente para todos los estudiantes de español. Vamos a hablar de la procrastinación, es decir, de aplazar tareas que deberíamos haber hecho pero que casi nunca conseguimos hacer.
Hoy hablamos de la procrastinación.
[Música post-introducción]
¿Qué es?
Antes de empezar a grabar este episodio he procrastinado. He consultado mi correo, he recibido una llamada, he visitado algunas páginas web y he ido a la cocina a darme un paseo para ver qué encontraba. Total, que tenía pensado grabar este episodio a las cuatro de la tarde y finalmente, lo he grabado mucho más tarde, lo he grabado a las nueve de la noche. Se puede decir que he procrastinado.
Y… ¿qué es la procrastinación? Vaya palabra más rara y difícil de pronunciar. Pro-cras-ti-na-ción. Es posible que escuches esta palabra por primera vez en tu vida así que te explico qué significa. La procrastinación es la acción o el hábito de retrasar alguna actividad que debes hacer para sustituirla por otra más placentera. A mí, por ejemplo, me encanta grabar los episodios que te ofrecemos así que quizá este ejemplo no sería el más adecuado, pero sí es verdad que a diario vivimos situaciones de este tipo.
Procrastinamos a diario
Está claro que procrastinamos cada día y no una vez, sino que varias veces. Procrastinamos cuando estamos retrasando la visita al dentista… Sí, a nadie le gusta ir al dentista; es una de las cosas más desagradables que hay, pero, debemos ir al dentista al menos una vez al año. En mi caso llevo procrastinando la visita a mi dentista más de un año. Debería ir a revisarme los dientes, pero soy bastante vago.
También, procrastinamos -o procrastinábamos- cuando teníamos que estudiar para un examen en el instituto o en la universidad. El examen era dentro de una semana y tú decías: “bah, mañana estudio, total, aún tengo siete días”. El problema es que decías eso cada día y finalmente te plantabas un día antes del examen y todavía no habías estudiado. Todo un clásico. La versión extrema de este tipo de procrastinación es cuando hacías esto pero llegaba la noche anterior y todavía no habías estudiado, que es lo que me sucedía a mí la mayor parte de las veces.
El gimnasio también es otro clásico de la procrastinación. Cuántas veces decimos eso de “el mes que viene me apunto al gimnasio”; llega el siguiente mes y vuelves a decir lo mismo, y así va pasando el tiempo sin que hagas nada para remediarlo. Y lo peor es que mucha gente se apunta, pero en realidad sigue procrastinando porque se apunta y nunca va.
Lo mismo pasa con algunas de las tareas del hogar. Por ejemplo, aquellos que tenemos jardín muchas veces decimos: “parece que el césped aún no está más alto, puede esperar”… Pasan los días, y al final el césped está tan alto que en lugar de parecer un jardín parece un bosque. ¡El césped llega hasta las rodillas!
Todas estas acciones que te acabo de comentar son típicas de procrastinadores. Y es que mientras decidimos si hacemos esas cosas o no, mientras creamos un debate interno en nuestra cabeza, vamos desaprovechando el tiempo que podríamos dedicar a esas actividades. Navegamos por internet, escuchamos música, vamos a la nevera a ver qué hay… En definitiva, evitamos nuestras responsabilidades para hacer otras cosas más agradables, otras cosas que nos producen más placer.
Estrategias para no ser un procrastinador
No obstante, para aquellos procrastinadores profesionales hay algunas estrategias -unas más sencillas que otras. Son estrategias que pueden ayudar a ser más productivos y aprovechar mejor el tiempo. Bueno, en realidad, estas estrategias sirven para todo el mundo y todas ellas son muy útiles. Aquí van algunas de ellas:
- Utiliza la regla de los dos minutos. La regla de los dos minutos es muy sencilla. Dice que si puedes hacer algo en los siguientes dos minutos, hazlo. No lo dejes para más tarde. La regla dice que dos minutos, pero quien dice dos, dice tres, cuatro, cinco o 15. Es una forma de decir que si puedes hacer algo ya y te va a llevar poco tiempo, no lo dejes para más tarde. De esta manera, te olvidarás durante el resto del día de esta pequeña tarea que tenías que hacer y no te comerá la cabeza.
- Establece rutinas. A los humanos nos encantan las rutinas. Funcionamos mejor. Las rutinas simplifican nuestra vida y hacen que hagamos las cosas de forma automática y con menos esfuerzo. Lo más difícil de este aspecto es adquirir un hábito. Un estudio realizado por la University College de Londres demostró que se necesitan unos 66 días para adquirir un hábito. Los primeros días son siempre los más difíciles. Una vez pasado ese tiempo, procrastinar será cosa del pasado.
- Organízate bien. Este episodio está íntimamente relacionado con el episodio número 182 en el cual te hablé de la importancia de la organización. Si estás bien organizado vas a procrastinar mucho menos. Vas a tener claro qué hacer, cómo hacerlo y cuándo hacerlo.
- Divide el trabajo de forma inteligente. No te plantees grandes metas. No seas demasiado ambicioso. Es mejor ir poco a poco, paso a paso. De lo contrario, te verás superado y acabarás eligiendo procrastinar. Así que recuerda, menos es más, por mucho que parezca lo contrario.
- Recompénsate. Una vez hayas acabado la tarea o la actividad que tenías que hacer debes recompensarte. Debes descansar. Así, verás que tras las obligaciones llegan los momentos de descanso y diversión.
- Y por último, pero no menos importante, evita las distracciones. A mí, esta estrategia me parece clave. Intentar hacer algo con el móvil al lado es misión imposible, al menos en mi caso. Cuando no es un mensaje, es un correo o una llamada. Para dejar de procrastinar hay que centrarse en tan solo una cosa. Adiós a la multitarea.
La ley de Parkinson
Y ya que menciono la multitarea te voy a hablar de la ley de Parkinson. No sé si la has escuchado alguna vez. Esta ley nos dice algo que me parece muy lógico. Nos dice que todo el trabajo se dilata indefinidamente hasta completar todo el tiempo disponible para su completa realización. De una forma más sencilla, esta ley dice que si tienes mucho tiempo para hacer algo, automáticamente, vas a dejar esa actividad para el último momento. Como ves, esta ley está relacionada con la procrastinación.
En resumen, no hay motivo para perder todo el día pensando en hacer una tarea cuando podrías hacer esa tarea en dos horas y tener el resto del día libre para ti. Lógico, verdad, lástima que algunas veces la procrastinación nos gane la partida.
Por eso para tener la Ley de Párkinson a vuestro favor es importante que establezcáis objetivos y límites de tiempo para hacer las tareas. También sería importante organizaros mediante una agenda o un calendario para dedicar un momento específico del día para cada una de las tareas que queráis realizar.
Y ya sabéis, la procrastinación es algo muy cercano a los estudiantes de un idioma. Con vuestro español debéis seguir todos los consejos que os he comentado anteriormente, para evitar aplazar las tareas pendientes y para mejorar así vuestro español poco a poco. Venga, ánimo, que esto es una carrera a largo plazo. ¡Es una maratón!
Y de esta forma vamos llegando al final del episodio. Pero, antes de eso, te quiero animar a que nos sigas en nuestro canal de Youtube. Hace un día subimos un vídeo sobre los diferentes usos de los verbos ser y estar. Que estoy seguro de que a vosotros también os cuesta, porque es un tema bastante complejo. Pero no es imposible, así que ved el vídeo y decidme qué os parece.
Si tenéis alguna duda o alguna pregunta podéis escribirnos un comentario en nuestra página web: hoyhablamos.com. Estaremos encantados de leer vuestros comentarios.
Y aquí acabamos, nos ayudarías mucho dejando una valoración de 5 estrellas en iTunes . Y recordad que podéis consultar la transcripción completa de este podcast en nuestra web.
Muchas gracias por escucharnos. Volvemos el lunes con un nuevo episodio de nuestro tema del mes.
Pasad un buen día, un buen fin de semana y, ¡hasta el lunes!
Muchas gracias, su podcast son muy practicos para aprender y entender el español 🙂
Muchas gracias a ti, Kevin 😀
estudiante = (solo) estudiar (un) dia ante
jajaja, ese es un juego de palabras muy típico, muy buena Patrick 😀
Muchas Gracias para su tegularmente y podcasts. Es mi favourite podcast de aprender Espanol tambien muy educativo. He estado aprendido Espanol para 10 meses y estoy muy agraxecido que entiendo 80% podcast.